En este artículo vamos a tratar los diferentes tipos de manchas que nos podemos encontrar en la piedra natural y la posible reparación de la misma caso de que sea posible. No obstante, el mejor reparador es el cuidado de la piedra natural y ciertos consejos que nos ayuden a evitar las manchas antes de que ocurran.
Empezaremos clasificando las piedras naturales en piedras duras y piedras blandas. En las piedras duras se incluyen los granitos, vulcanitas y pizarras; y en las piedras blandas se incluyen calizas, pizarras, areniscas y mármol.
Las piedras blandas son sensibles al ácido y por tanto debemos alejarlas de esos productos. Debemos tener en cuenta que bebidas como zumos de frutas y bebidas con gas son consideradas ácidas.
¿Qué puede dañar una piedra natural?
Ácido: Derrames de bebidas o alimentos que contengan ácido pueden provocar manchas mates en superficies de mármol y caliza. Los daños por el ácido pueden ser irreparables.
Alcalinos: Aparte de los productos químicos que contienen ácido, aquellos con un alto contenido de alcalinos o lejías pueden dañar los suelos y hacerles perder su brillo y elegancia.
Humedad: Un exceso de humedad puede provocar picaduras, astillas y un amarilleamiento del color que pueden dañar la piedra para siempre.
Arañazos: La arena y la gravilla transportada desde el exterior en los zapatos pueden fácilmente arañar el suelo como si se tratara de una lija. Las patas sin protección de los muebles también pueden provocar arañazos. Arrastrar objetos pesados o afilados por el suelo puede ocasionar arañazos muy profundos que pueden ser permanentes.
Manchas: Incluso las piedras duras pueden decolorarse si se derrama comida, si se apoyan cacerolas, por las patas metálicas de los muebles, si cae aceite, tinta, etc.
Procedimiento de mantenimiento inadecuado: Un uso continuo de agua como único agente limpiador (sin productos químicos), o el uso de fregonas sucias, o no cambiar la solución de limpieza con suficiente frecuencia, puede hacer que tanto la piedra blanda como la dura parezca sucia, rayada y poco atractiva.
Además, es aconsejable un mantenimiento anual para revivir el brillo, especialmente cuando el suelo está expuesto a un tráfico medio o pesado.
¿Cuáles son los métodos de limpieza mejor establecidos?
Barrido: Es importante retirar la suciedad de los suelos porque es abrasiva. Cuanto más a menudo se elimine la suciedad, más tiempo conservará el suelo su apariencia original.
Aspiradoras: Una buena aspiradora trabaja mejor y más eficientemente que una escoba en una superficie con texturas.
Mopa húmeda: Una mopa húmeda es capaz de eliminar suciedad abrasiva microscópica y agentes que pueden provocar manchas. Lo ideal sería hacerlo luego del barrido o aspirado.
Abrasivos (limpieza mecánica): Los abrasivos son a veces muy útiles como agente de limpieza, pero deben limitarse a superficies no pulidas. Los abrasivos se pueden combinar con detergentes o jabones para fregar una superficie y eliminar finas capas de la superficie.
¿Cómo eliminar manchas de la piedra natural?
Piedras blandas
Si hay contaminantes tales como: suciedad básica, capas de suciedad, finas capas de cera, manchas superficiales de aceite y grasa, manchas de hollín, caucho y alquitrán, o incluso eflorescencias y residuos de cemento
Eliminar con un limpiador ligeramente alcalino (pH=10).
En el caso de manchas superficiales de óxido provocadas por sustancias ferrosas u objetos tales como fertilizantes, herramientas, acero, etc.
Eliminar con un eliminador de óxido ligeramente alcalino (pH=9)
Piedras duras
Si hay decoloración oxida e inorgánica: eliminar las decoloraciones inorgánicas, tales como manchas de óxido, usar un eliminador de óxido, un producto basado en ácido fosfórico.
Si hay residuos de cal, marcas de óxido y residuos de jabón: se pueden eliminar con un limpiador desinfectante basado en ácido orgánico con pH=1.
En esta galería mostramos manchas en diferentes tipos de piedras naturales: mármol, pizarra, granito. etc.